"Mi porpósito es hacer que el hombre sea incondicionalmente libre, porque yo sostengo que la única espiritualidad es la incorruptibilidad del propio Ser, que es eterno, que es la armonía entre la razón y el amor. Esta es la absoluta, incondicionada Verdad que es la Vida misma." J.Krishnamurti

24.3.12

El Poeta


Para mí, el solitario, sólo para mí
brillan las innumerables estrellas de la noche,
la fuente de piedra susurra su mágica canción,
y sólo para mí, para mí, el solitario,
surcan las sombras coloreadas
igual que nubes que deambulasen como sueño sobre el paisaje.
No un hogar ni un sembrado,
ni bosque o profesión me fueron concedidos,
mío es tan sólo lo que no tiene dueño,
el arroyo que cae tras el velado bosque,
mío el fecundo mar,
mío el gorgojeo de los niños que juegan, el dolor y las lágrimas del enamorado solitario en el atardecer.
Míos también los templos de los dioses,
el venerable bosque del pasado.
Y no es menos mi patria en el futuro
la iluminada bóveda celeste:
Mi alma alza el vuelo a veces con nostalgia
para ver el futuro dichoso de los hombres,
para ver el amor, vencedor de la ley, amor de pueblo a pueblo.
Vuelvo a encontrarme a todos, cambiados con nobleza:
al rey, al campesino, al comerciante, al laborioso pueblo de los marineros,
al jardinero y al pastor, todos, agradecidos,
celebran la universal fiesta del futuro.
Sólo falta el poeta,
él, testigo solitario,
portador del anhelo del hombre y su pálida imagen,
pues que el futuro, el mundo consumado
no necesitan más. Sobre su tumba
muchas coronas se marchitan,
pero ni rastro ya de su recuerdo.

Hermann Hesse

24.2.12



Amor, hoy compuse una bella melodía
Y aunque no puedas oírla, ella te oye y grita
Grita a tus ojos pintados de roció y fantasía
Esos ojos que inspiran mi mañana y mi ocaso.
En otro acorde encontré tu sonrisa
Dulce y leve como silencio, de pájaros en la noche
que pareciera que cantaran, esa melodía de tu alma
Y aunque no puedas oírla, ella te oye y se canta
Se canta así misma en un mundo, que los dos sabemos triste
Se canta así misma en una vida, que los dos sabemos incierta
Se canta en el alba de en un amor, del que hoy no puedo escapar.
En este poema mi melodía canta, todo lo que ayer no pude decirte.

J.Rioboo



10.2.12

Venti poesie d'Amore e una canzone disperata


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Posso scrivere i versi più tristi stanotte.

Scivere, per esempio: "La notte è stellata,
e tremano, azzurri, gli astri, in lontananza".

Il vento della notte gira nel cielo e canta.

Posso scrivere i versi più tristi stanotte.
Io l'ho amata e a volte anche lei mi amava.

In notti come questa l'ho tenuta tra le braccia.
L'ho baciata tante volte sotto il cielo infinito.

Lei mi ha amato e a volte anch'io l'amavo.
Come non amare i suoi grandi occhi fissi.

Posso scrivere i versi più tristi stanotte.
Pensare che non l'ho più. Sentire che l'ho persa.

Sentire la notte immensa, ancor più immensa senza lei.
E il verso scende sull'anima come la rugiada sul prato.

Poco importa che il mio amore non abbia saputo fermarla.
La notte è stellata e lei non è con me.

Questo è tutto. Lontano, qualcuno canta. Lontano.
La mia anima non si rassegna d'averla persa.

Come per avvicinarla, il mio sguardo la cerca.
Il mio cuore la cerca, e lei non è con me.

La stessa notte che sbianca gli stessi alberi.
Noi, quelli d'allora, gia' non siamo gli stessi.

Io non l'amo più, è vero, ma quanto l'ho amata.
La mia voce cercava il vento per arrivare alle sue orecchie.

D'un altro. Sarà d'un altro. Come prima dei miei baci.
La sua voce, il suo corpo chiaro. I suoi occhi infiniti.

Ormai non l'amo più, è vero, ma forse l'amo ancora.
E' così breve l'amore e così lungo l'oblio.

E siccome in notti come questa l'ho tenuta tra le braccia,
la mia anima non si rassegna d'averla persa.

Benchè questo sia l'ultimo dolore che lei mi causa,
e questi gli ultimi versi che io le scrivo.

Pablo Neruda

20.1.12

Lo que llamas amor es solo sexo


Pregunta : ¿Por qué amo, luego odio y luego muestro indiferencia a la misma persona?


Tushara, todavía no sabes lo que es el amor. Todavía no sabes que muchas otras cosas se hacen pasar por amor, te engañan...


Todavía no has amado; es sólo el apetito sexual en ti. Y lo llamo apetito intencionadamente. Cuando tienes hambre te interesa la comida. El aroma que llega de la cantina Vrindavan te atrae; todo lo demás se vuelve poco importante. Te encuentras yendo hacia Vrindavan.

Una vez que has comido, todo interés en la comida desaparece, y si has comido demasiado, incluso te sientes repelido por la comida.

Si has comido demasiado, más de lo necesario, sientes náuseas..., surge en ti una enfermedad. Y cuando estás saciado de comida, puedes pasar cerca de Vrindavan: no hueles los aromas, puedes seguir pensando mil y un pensamientos y puedes permanecer indiferente a la comida.


Tu amor no es más que apetito sexual. Por eso primero te sientes atraído, "muy enamorado". A esa atracción la llamas amor. Igual que la gente dice que adora los helados, así amas a la gente.

¿Pero cuánto tiempo puedes adorar un helado? Puedes comer, pero ¿cuánto?...


En primer lugar, piensas que amas, Tushara, pero eso no es amor; sólo un apetito físico, un fenómeno corporal, un fenómeno químico; no tiene nada que ver con el amor.


El amor es algo muy diferente. No tiene que ver necesariamente con el sexo. Puede que el sexo forme parte de él, puede que no forme parte de él.


Puedes amar a una persona sin ninguna relación sexual. Eso es lo que llamamos amistad... La amistad es un amor más profundo que la relación sexual, porque la amistad da y no pide nada a cambio.

La relación sexual es una explotación mutua: estás explotando el cuerpo de la otra persona y él o ella está explotando tu cuerpo; ambos os estáis utilizando mutuamente. Pero como decir que es puro sexo parece feo, lo llamamos amor. Estaría bien que lo llamaseis simple sexo, sería verdad, sincero, y no surgirían problemas, porque entonces sabrías que es un apetito. Estás satisfecho un momento y luego, si la otra persona sigue exigiendo y tú sigues jugando el juego, habrá odio, porque sentirás repulsa. Y tarde o temprano te volverás indiferente, porque has explorado el cuerpo del otro y él ha explorado tu cuerpo: ya no hay nada nuevo, conocéis los territorios. Ahora ya no hay intriga, ya no hay misterio en el que entrar. Has acabado; surge la indiferencia.


Tushara, lo que llamas amor es sólo sexo. Llámalo sexo, no lo llames amor...

Lo primero, mi sugerencia: llámalo sexo puro y simple. Y no hay nada de malo en el sexo puro y simple; es natural. Pero no hay necesidad de ocultarlo detrás de la hermosa palabra "amor"...


Sé simple, sé auténtico, sincero. Si haces esto, la mitad del trabajo está hecho. Entonces un día serás capaz de ver la diferencia. Un día te enamorarás y verás que no es sólo atracción fisiológica, química, sino algo más elevado, algo superior: dos vibraciones que se armonizan, dos espíritus que se sienten juntos, dos seres que se sienten armoniosos.


Mis propias palabras son: si dos cuerpos se sienten atraídos mutuamente, es sexo; si dos mentes se sienten atraídas mutuamente, es amor; si dos almas se sienten atraídas mutuamente, es oración.


Y la oración es la forma más elevada. El sexo es la forma más baja. No consideres lo bajo como alto; de lo contrario permanecerás fuera del camino...


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Osho


24.7.11

Reflexiones de amor


Quería compartir estas reflexiones que fui escribiendo con el tiempo y decidí ordenarlas y armar algo como lo que quedo, se basan en mi meditación, aprendizaje y experiencia de hechos que cambiaron mi visión de muchas cosas en cuanto al amor y a la vida. Muchas personas tienen una visión distorsionada del amor a causa del entorno y el sistema en el que vivimos, o peor aun, no tienen ninguna noción y tienen la creencia de que el amor y su relación es algo que no se aprende ni se reflexiona... Todo lo que siento y pienso representa mi presente por lo tanto no es nada absoluto, ni en mi, ni en vos, si no lo que considero mi “crecimiento” hasta el momento actual.

Aprendí que el sentimiento de amor es algo que comienza en mi, es mi responsabilidad, es algo puramente de mi alma y lo comparto como comparto mi tiempo y mis penas. Yo soy responsable del amor que sienta hacia otros seres, si quiero compartir mi amor soy yo el que lo elige, soy el creador de aquello que quiere realizarse por medio de mis sentimientos. Si mi amor falla y mi sentir flogea, hay algo que esta fallando en mi y aunque busque excusas exteriores por medio de mi narcisismo para no poder aceptar y aceptarme, soy yo el que no siente. No puedo culpar a otro de lo que siento o no siento. Si no resuelvo y desato mis nudos, aunque cambie a las personas como objetos, aunque cambie situaciones o hechos jamas voy a poder “Construir” sanamente relaciones de amor con otras personas. El amor es un movimiento del alma que se desentiende de la razón pero si quiero “construir” algo con otra persona compartiendo amor, necesito que ese amor sea consciente.

Personas que están en “pareja” durante muchos años sin tener ganas de verse, sin tener un vinculo especial o sin ni siquiera mirarse a los ojos, o personas que se ven obligadas a abandonar relaciones por causas que repiten infinitamente con distintas personas, construyendo algo que después tienen que derribar sin entender por que. El amor no es solo las relaciones de “pareja”, si no también de familia, amigos, o cualquiera de las barreras mentales que inventemos. Es mi relación con absolutamente todas las personas de mi entorno. Es mas, muchas veces se ve nuestra verdadera forma de ser y amar con aquellos que desconocemos totalmente.

Aprendí que la “seguridad” de estar en pareja es engañosa e ilusoria. Y que nunca va ni puede estar por encima del amor mismo, ya que el amor no entiende ni lo tuyo ni lo mio, solo lo que es. Si voy a “construir” en pareja que sea desde el dar amor puro y no desde la costumbre y el comodo “bienestar”. No podría encontrar una forma mas facil, sincera y realista como lo describe este fragmento de Khalil Gibran; “Pero si tu temor te induce a buscar tan solo la paz y el goce del amor, es preferible que cubras tu desnudez y abandones su portal. Y marches hacia un mundo sin primaveras en el que rieras y lloraras, pero no con toda tu risa ni con todo tu llanto. El amor no da ni toma nada excepto de sí mismo.”

Aprendí que el amor no tiene fechas de vencimiento, que el amor no se termina, o solo quizas cuando nuestra vida llegue a su fin. Pueden terminarse nuestras relaciones con algunas personas o cosas por distintas causas, ¿pero esto tiene que ver con el amor? ¿puede terminarse el amor de una madre hacia su hijo? Nuestro orgullo siempre puede encontrar la forma de distanciarnos o entrar en conflictos pero esto nada tiene que ver con amor. “La pena, la sospecha, el abandono, la infinita tristeza y las heridas del orgullo, son el pretexto. Qué pequeños resultan al lado de una frágil mirada. Porque los grandes males que recuerdo son errores de danza y no la danza misma. “ Este fragmento de Silo me dice cuanto nos cuesta aceptar el pasado y nuestros errores de danza.

Aprendí que si quiero compartir amor a las otras personas necesito saberme yo mismo, estar atento, comprender. Los estados de consciencia pueden variar mucho y por muchas razones, per no es excusa para no buscar humildemente el crecimiento y la virtud. Comprenderme, estar atento, activo, responsable de mi mismo y de mi entorno. Tratar de escuchar a las personas por lo que de verdad están diciendo y no lo que yo quisiera escuchar; Todo esto esta ligado al amor y su acción. Aceptar, cuando alquien nos brinda su amor lo recibamos o no, aceptar que asi es. Aceptar cuando no tenemos amor para compartir y no culparme por ello. Aceptar el amor y crecer conscientemente junto con el, aceptar el dolor y no escaparme de el con autoengaños. Quizás nunca podamos definir que es el amor de forma total y quizás tampoco tenga sentido hacerlo, pero si tenemos que tener sentido nosotros y nuestra forma de relacionarnos y tratarnos.

Arribara el día en que nos demos cuenta, de que podamos sentir que todos somos uno y nos saquemos las mascaras y las armaduras que llevamos para “protegernos”. En realidad no es protegerse de lo que nos va pasar, si no de lo que nos paso. Que el amor sea el principio moral de todas las cosas, los abrazo!

Para terminar dejo un mensaje de alguien mas sabio que yo: Espero lo disfruten.

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12.6.11

El Tiempo


Y un astrónomo dijo: Maestro, ¿y el Tiempo?

Y él respondió:

Mediríais el tiempo, lo inconmensurable.

Ajustaríais vuestra conducta y aun dirigiríais la ruta de vuestro espíritu de acuerdo con las horas y las estaciones. Del tiempo haríais una corriente a cuya orilla os sentaríais a observarla rodar.

Sin embargo, lo eterno en vosotros es consciente de la eternidad de la vida.

Y saber que el ayer es sólo la memoria del hoy y el mañana es el ensueño del hoy.

Y que aquello que canta y medita en vosotros mora aún en los límites de aquel primer momento que esparció las estrellas en el espacio.

¿Quién de entre vosotros no siente que su capacidad de amar es ilimitada?

Y, a pesar de ello, ¿quién no siente ese mismo amor, aunque sin límites, rodeado en el centro de su ser y no moviéndose sino de un pensamiento de amor a otro pensamiento de amor, ni de un acto de amor a otro acto de amor? ¿Y no es el tiempo, como es el amor, indivisible y sin etapas?

Pero si, en vuestro pensamiento, debéis medir el tiempo en estaciones; que cada estación encierre todas las otras estaciones.

Y que el hoy abrace al pasado con remembranza y al futuro con ansia.


Khalil Gibran - El Profeta

27.5.11

Las Piedras


Y un día, mientras Fardous, el griego, estaba caminando por el jardín, tropezó con una piedra y montó en cólera. Y se volvió y recogió la piedra diciendo en voz baja:

¡Oh cosa muerta que te has atravesado en mi camino! - y arrojó lejos la piedra.

Y Almustafá, el elegido y el bienamado dijo:

¿Por qué dices: " ¡oh cosa muerta?" ¿Has estado tanto tiempo aquí, en este jardín, y no sabes que aquí nada está muerto? Todas las cosas viven y resplandecen en el conocimiento del día y en la majestad de la noche. Tú y la piedra sois uno; la única diferencia está en los latidos del corazón. Pensarás, amigo mío, que tu corazón late un poco más de prisa. Sí; pero no está tan tranquilo como el de la piedra.

El ritmo de la piedra acaso sea otro ritmo, pero yo te digo que si sondeas las profundidades de tu alma y mides las alturas del espacio, no oirás más que una melodía, y que en esa melodía la piedra y la estrella cantan, una con otra, al unísono perfecto.

Si mis palabras no llegan a tu entendimiento, no importa; ya será en otra aurora. Si has lanzado una maldición a esta piedra porque en tu ceguera has tropezado con ella, entonces maldecirías a una estrella si tu cabeza se golpeara en ella, en el cielo. Pero un día llegará en que reunirás piedras y estrellas, como el niño que reúne los lirios del valle, y entonces sabrás que todas estas cosas son vivientes y fragantes.


Kahlil Gibran.

24.5.11

El Ego


El apego es causado cuando el alma individual se confunde con la mente con el intelecto y con el sentido Egoico

El sentido interno da existencia a la mente, al intelecto y al ego.

Cuando este sentido interno simplemente fluye de un objeto al otro sin fijarse en ninguno, se lo considera mente.

Cuando el sentido interno, con la ayuda del conocimiento se fija particularmente en un objeto y distingue características opuestas, por ejemplo lo permanente de lo impermanente se le llama intelecto

La ignorancia surge cuando el sentido interno se considera a si mismo como independiente ( de todo el resto de la creación) si el alma individual se fija a esta ignorancia, pierde su forma natural, produciendo el Ego

Por lo tanto, la mente, el intelecto y el ego son obstaculos para el alma individual pues la mantienen inquieta. y le impiden por esto entrar en reposo y experimentar su estado natural. El alma individual es pura, libre y omnisciente en realidad, pero se debate en la ilusión de estar ligada a la naturaleza como un cristal transparente que parece estar teñido de color por su proximidad a una flor colorida.


Maharishi Patanjali

16.5.11

El Perro Sabio




Si supieras, que aunque no puedo verte, te siento a través del tiempo. Te percibo a través del espacio. Si supieras que siento todo lo que sentís... Y cuando no estas bien, yo lo siento, algo dentro mio tiembla y habla desde lugares profundos.
Si supieras que te entiendo, que te respeto, que no te necesito, que no espero nada y que lo único que quiero es tu felicidad... Que te perdono, me perdono y que no hay nada absolutamente nada, ni tristeza, ni heridas del orgullo, ni egos que puedan hacerme olvidar lo importante que fuiste para mi. Gracias por todo lo que compartimos, gracias por todo. Solo quiero decirte que te quiero, que eso no va a cambiar jamas, ni en esta vida ni en la eternidad. Y que aunque ahora estemos lejos, y nuestros viejos sentimientos se hayan ido, yo siempre voy a estar para abrazarte.
Quizás ni leas esto, quizás este errado, quizás yo sea solo un mal recuerdo. ¿Pero que tengo que perder? Te abrazo y te dejo un regalo:


El Perro Sabio


Un día, un perro sabio pasó cerca de un grupo de gatos. Y viendo el perro que los gatos parecían estar absortos, hablando entre sí, y que no advertían su presencia, se detuvo a escuchar lo que decían.

Se levantó entonces, grave y circunspecto, un gran gato, observó a sus compañeros.

-Hermanos -dijo-, orad; y cuando hayáis orado una y otra vez, y vuelto a orar, sin duda alguna lloverán ratones del cielo.

Al oírlo, el perro rió para sus adentros, y se alejó de los gatos, diciendo:

-¡Ciegos e insensatos felinos! ¿No está escrito, y no lo he sabido siempre, y mis padres antes que yo que lo que llueve cuando elevamos al Cielo súplicas y plegarias son huesos, y no ratones?


Khalil Gibran


3.5.11

Relación y aislamiento




La vida es experiencia, experiencia en la vida de relación. No se puede vivir en el aislamiento. La vida es, pues, convivencia, y ésta es acción. ¿Cómo puede tenerse esa capacidad para comprender la relación que es la vida? ¿No significa la relación, además de comunión con las personas, intimidad con las cosas e ideas? La vida es relación, que se expresa mediante el contacto con cosas, personas e ideas. Comprendiendo la relación, tendremos capacidad para hacer frente plena y adecuadamente a la vida. Nuestro problema no es, pues, la capacidad (ésta no es independiente de la relación) sino más bien la comprensión de la convivencia, que naturalmente producirá capacidad de pronta flexibilidad, pronta adaptación y pronta respuesta.

La vida de relación es sin duda el espejo en el cual nos descubrimos a nosotros mismos. Sin convivencia, no sos. Ser es estar relacionado; estar relacionado es existir. Sólo existís en la relación; fuera de ella no existís, la existencia carece de sentido. No es porque pensás que sos, que surgís a la existencia. Existís porque estás relacionado; y es la falta de comprensión de la relación lo que causa conflictos. no hay comprensión de la convivencia porque nos servimos de ésta como simple medio de promover la realización, la transformación, el devenir. La convivencia, empero, es un medio de autodescubrimiento porque la relación es ser, es existencia. Sin relación, no soy. Para comprenderme a mí mismo debo comprender la relación. Ésta es el espejo en que puedo mirarme. Dicho espejo puede estar deformado o puede estar como es y reflejar lo que es. Pero la mayoría de nosotros ve en esa relación, en ese espejo, las cosas que más nos agradaría ver; no vemos lo que es. Preferimos idealizar, evadirnos, vivir en el futuro en vez de entender la convivencia en el inmediato presente.

si examinamos nuestra vida, nuestras relaciones con los demás, veremos que es un proceso de aislamiento. El prójimo, en realidad, no nos interesa; aunque hablemos bastante al respecto, el hecho es que no nos interesa. Sólo estamos relacionados con alguien mientras esa relación nos resulta grata, mientras nos brinda un refugio, mientras nos satisface. Pero no bien sufre ella una perturbación que a nosotros nos produce incomodidad, dejamos de lado esa relación. En otros términos: sólo hay relación mientras estamos satisfechos. Esto podrá parecer desagradable, pero si realmente examináis vuestra vida con atención, veréis que se trata de un hecho; y el eludir un hecho es vivir en la ignorancia, lo cual jamás podrá producir verdadera convivencia. De suerte que si echamos una mirada a nuestra vida y observamos nuestra vida de relación, vemos que ella es un proceso de erigir resistencias contra los demás, muros por encima de los cuales miramos y observamos al prójimo; y ese muro siempre lo retenemos, y detrás de él permanecemos, ya se trate de un muro psicológico, material, económico o nacional. Mientras vivimos en aislamiento, detrás de un muro, no existe la convivencia con los demás; y vivimos encerrados porque resulta mucho más satisfactorio y creemos que es mucho más seguro. El mundo está tan desgarrado, hay tanto dolor, tanta pesadumbre, guerra, destrucción y miseria, que deseamos escapar y vivir dentro de los muros de seguridad de nuestro propio ser psicológico. De suerte que, para la mayoría de nosotros, la vida de relación es en realidad un proceso de aislamiento; y es obvio que tal relación construye una sociedad que es también aisladora. Eso, exactamente, es lo que ocurre a través del mundo: permanecéis en vuestro aislamiento y extendéis la mano por sobre el muro, llamando a eso nacionalismo, fraternidad o lo que os plazca; pero lo cierto es que los gobiernos soberanos y los ejércitos continúan. Es decir, aferrándoos a vuestras propias limitaciones, creéis que podéis establecer la unidad mundial, la paz del mundo; y ello es imposible. Mientras haya una frontera ‑nacional, económica, religiosa o social- es un hecho evidente que no puede haber paz en el mundo.

El proceso del aislamiento es el proceso de la búsqueda del poder. Y sea que uno busque el poder a titulo individual o para un grupo racial o nacional, tiene que haber aislamiento porque el deseo mismo de poder, de posición, es separatismo. Eso, en suma, es lo que cada cual desea, ¿verdad? Cada cual desea una posición fuerte en la que pueda dominar: en el hogar, en la oficina o en un régimen burocrático. Cada cual anda en busca de poder, y por el hecho de buscar el poder establecerá una sociedad basada en el poder: militar, industrial, económico, y lo demás. Ello, una vez más, es evidente. ¿El deseo de poder no es aislador por su propia naturaleza? Creo que es muy importante comprender eso; porque el hombre que desea un mundo pacifico, un mundo en el que no haya guerras, ni espantosa destrucción, ni miseria catastrófica en escala inconmensurable, tiene que comprender esta cuestión fundamental. ¿No es así? El hombre afectuoso, bondadoso, no tiene sentido alguno del poder.

Vivir en el aislamiento es cosa inexistente; no hay país; ni pueblo, ni individuo, que pueda vivir aislado. Ello no obstante, como buscáis el poder de tantas maneras diferentes, engendráis aislamiento. El nacionalista es una maldición porque con su espíritu de nacionalismo, de patriotismo, erige un muro de aislamiento; está tan identificado con su patria que construye un muro contra las demás. ¿Y qué ocurre cuando levantas un muro en contra de algo? Ese algo golpea constantemente contra nuestro muro. Cuando resistís a algo esa misma resistencia indica que estás en conflicto con lo otro. De suerte que el nacionalismo, que es un proceso de aislamiento, que es el resultado del afán de poder, no puede traer paz al mundo. El hombre que es nacionalista y habla de fraternidad dice una mentira, vive en estado de contradicción.

La vida de relación es un proceso de autorrevelación; y si uno no se conoce a sí mismo, si no conoce las modalidades de la propia mente y corazón, el mero hecho de establecer un orden externo, un sistema, una fórmula sagaz, tiene muy poco sentido. Lo importante es comprenderse uno mismo en relación con los demás. Entonces la relación no se convierte en un proceso de aislamiento, sino que es un movimiento en el que descubrís, propios pensamientos, propios empeños; y es ese descubrimiento, precisamente, que es el comienzo de la liberación, el comienzo de la transformación.


Jiddu Krishnamurti

13.4.11

Me gustas cuando callas


Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

Pablo Neruda

15.3.11

La Amada



En este cuarto, quieto y solitario, ayer se sentó la amada de mi corazón. Sobre estos suaves cojines de color rojo apoyó su hermosa cabeza y en esta copa de cristal bebió su vino, mezclado con una gota de esencia de rosas.

Todo esto era ayer y el ayer es un sueño que no regresará jamás. Hoy, la mujer que amó mi corazón se fue a una tierra distante, desierta y fría, llamada tierra de la soledad y del olvido. Las huellas de los dedos de la mujer que amó mi corazón aún están visibles en el cristal del espejo; el perfume de su aliento se detiene en los pliegues de mi ropa y el eco de su voz se repite en los rincones de la casa. Pero la mujer, ella misma -la mujer que amó mi corazón- se alejó hacia una tierra distante, llamada tierra del abandono y del olvido. Mañana abriré las ventanas y las ráfagas de viento entrarán y llevarán, para siempre, todo lo que aquella hermosa hechicera dejó en este sitio: el perfume de su aliento, la sombra de su alma, el eco de su voz, las huellas de sus dedos en el cristal del espejo... El retrato de la mujer que amó mi corazón, continúa al lado del lecho.

Las cartas de amor que me escribió aún permanecen en la caja de plata incrustada en coral. Y la trenza de sus cabellos de oro, que me envió como recuerdo, se conserva envuelta en seda y perfumada en almizcle e incienso. Todos esos recuerdos permanecerán en su sitio hasta la aurora y, cuando la aurora llegue, abriré las ventanas para que entre el viento y las arrastre hacia las tinieblas de la nada, donde mora una quietud sin palabras. La mujer que amó mi corazón es semejante a las mujeres que amaron vuestros corazones, oh, jóvenes. Y es una criatura extraña. Para tallarla, usaron los dioses la modestia de la paloma y la mutabilidad de la serpiente; la vanidad del pavo real y la ferocidad del lobo; la belleza de la rosa blanca y el terror de una noche oscura y un puñado de cenizas.

Conocí a la mujer que amó mi corazón desde la infancia y corría tras ella por los campos. La conocí en la juventud y contemplaba la sombra de su rostro en los libros. Reconocía las curvas de su cuerso en las nubes del cielo y oía su voz en el murmullo de los arroyos. Y la conocí en la madurez. Y conversaba con ella y le hablaba de los dolores de mi corazón y de los secretos de mi alma. Todo esto, era ayer; y el ayer es un sueño que jamás regresará. Hoy, aquella mujer se fue hacia una tierra distante, fría y desierta, llamada tierra de la soledad y del olvido.

Y el nombre de la mujer que amó mi corazón es la vida. La vida es una mujer hermosa y fascinante, que atrae nuestros corazones y hechiza nuestras almas. Envuelve nuestra existencia con promesas, cuyo cumplimiento aplaza y difiere y, cuando se nos entrega, provoca el tedio en nosotros. La vida es una mujer que se baña en-las lágrimas de sus enamorados y se perfuma con la sangre de sus víctimas. La vida es una mujer que viste la blancura de los días cubriendo la negrura de las noches. La vida es una mujer que acepta el corazón humano como amante y lo rechaza como esposo. La vida es una mujer h ermosa y perversa. Y, quien descubre su perversidad, aborrece su belleza.


Khalil Gibran


19.2.11

Mi Dulce otoño


Eres mi dulce otoño
Entre los besos presentes en la nostalgia
Te escucho desde lejos en el olvido no olvidado
Entre el susurro repentino de las hojas jamas olvidadas.
Eres mi dulce otoño
Por que sos mi música en notas y palabras
Por que sos todo de mi alma, musa de ensueños
que emerge en mi corazón entre todo lo perdido.

Hoy mueren todas las estrellas y aun estas aquí conmigo
llueve en agua y en versos y mas te extraño, mas te quiero cerca mio.
con tu sonrisa que emerge como el alba
en un recuerdo, en la lluvia, mas te extraño, mas te quiero cerca mio.

Eres mi dulce otoño
En la noche, que me convierte en poeta
soy solo una hoja ya caída, que escribe entre faroles apagados
Pero vos mi dulce otoño, aun estas aquí conmigo.



Syd Rioboo






26.1.11

Amada inmortal


Carta escrita por Beethoven a su "Amada inmortal" en la cual refleja sus sentimientos y personalidad que se ve tambien en sus obras. La carta fue encontrada entre sus papeles después de su muerte, la amada nunca fue identificada aunque existan varias teorías, también es muy posible que la carta nunca haya sido entregada.

~

Mi ángel, mi todo, mi yo… ¿Por qué esa profunda pesadumbre cuando es la necesidad quien habla? ¿Puede consistir nuestro amor en otra cosa que en sacrificios, en exigencia de todo y nada? ¿Puedes cambiar el hecho de que tú no seas eternamente mía y yo eternamente tuyo? ¡Ay Dios! Contempla la hermosa naturaleza y tranquiliza tu ánimo en presencia de lo inevitable. El amor exige todo y con pleno derecho: a mí para contigo y a ti para conmigo. Sólo que olvidas tan fácilmente que yo tengo que vivir para mí y para ti. Si estuviéramos unidos ni tú ni yo hubiéramos sentido lo doloroso. Mi viaje fue horrible…

Alégrate, sé mi más fiel y único tesoro, mi todo, como yo para ti. Lo demás que tenga que ocurrir y deba ocurrir con nosotros, los dioses habrán de enviarlo…

Tarde del lunes… Tú sufres. ¡Ay! donde yo estoy, también allí estás tú conmigo. Conmigo y contigo haré yo que pueda vivir a tu lado. Qué vida ¡ ¡ ¡así!!! Sin ti… perseguido por la bondad de algunas personas que no quiero recibir porque no la merezco. Me duele la humildad del hombre hacia el hombre. Y cuando me considero en conexión con el universo, ¿qué soy yo y qué es aquel a quien llaman más grande? Y sin embargo… ahí aparece de nuevo lo divino del hombre. Lloro al pensar que probablemente no recibirás mi primera noticia antes del sábado. Tanto como tú me amas, ¡mucho más te amo yo a ti…! ¡Buenas noches! En mi calidad de bañista, debo irme a dormir. ¡Ay, Dios! ¡Tan cerca! ¡Tan lejos! ¿No es nuestro amor una verdadera morada del cielo? ¡Y tan firme como las murallas del cielo!

Buenos días, siete de julio. Todavía en la cama se agolpan mis pensamientos acerca de ti, mi amada inmortal; tan pronto jubilosos como tristes, esperando a ver si el destino quiere oímos. Vivir sólo me es posible, o enteramente contigo, o por completo sin ti. Sí, he resuelto vagar a lo lejos hasta que pueda volar a tus brazos y sentirme en un hogar que sea nuestro, pudiendo enviar mi alma al’ reino de los espíritus envuelta en ti. Sí, es necesario. Tú estarás de acuerdo conmigo, tanto más conociendo mi fidelidad hacia ti, y que nunca ninguna otra poseerá mi corazón; nunca, nunca…

¡Oh, Dios mío! ¿Por qué habrá que estar separados, cuando se ama así? Mi vida, lo mismo aquí que en Viena, está llena de cuitas. Tu amor me ha hecho al mismo tiempo el ser más feliz y el más desgraciado. A mis años necesitaría ya alguna uniformidad, alguna normalidad en mi vida. ¿Puede haberla con nuestras relaciones…? Ángel, acabo de saber que el correo sale todos los días. Y eso me hace pensar que recibirás la carta enseguida.

Estáte tranquila. Tan sólo contemplando con tranquilidad nuestra vida alcanzaremos nuestra meta de vivir juntos. Estáte tranquila, quiéreme. Hoy y ayer ¡cuánto anhelo y cuantas lágrimas pensando en ti… en ti, mi vida… mi todo! Adios… ¡quiéreme siempre!. No desconfíes jamás del fiel corazón de tu enamorado Ludwig.

Eternamente tuyo,
eternamente mía,
eternamente nuestros.


Ludwig Van Beethoven

18.1.11

La Conciencia


Ustedes conocen el estado de sueño profundo. El sujeto duerme, la autocrítica disminuye y cualquiera sugerencia del exterior (cualquier estímulo) se amplifica, se modifica, cubre la conciencia y se cree en él. En un sueño puede pasar cualquier cosa y lo que sucede ahí no es criticado. En ese sueño profundo, las contradicciones más enormes pueden aparecer y se cree en ellas. Es el campo en que la autocrítica y el raciocinio están reducidos casi al mínimo. Sicólogos contemporáneos han destacado algunos mecanismos como los de dramatización, elaboración secundaria, desplazamiento, etc., en donde se ve toda la movilidad irracional del sueño, las transformaciones que sufre. En definitiva, lo más rescatable es advertir en ellos la disminución, el estrechamiento del poder de raciocinio. Y el gran poder, la gran susceptibilidad, la gran sugestión que hacen las imágenes sobre nuestra conciencia hasta cubrir la voluntad. Ese es un nivel de conciencia que todos reconocemos.

Hay otro, que podríamos llamar de semisueño. No es el estado de vigilia ordinaria, como en el que estamos ahora. No es el estado de sueño profundo tampoco. Es un estado intermedio. Ese estado se patentiza cuando entramos al sueño profundo o cuando salimos de él. Un estado en que está mezclada un poco la razón y un poco el completo. Un estado en el que los ensueños se desplazan con mucha velocidad y se nos evidencian de un modo muy pintoresco. Una suerte de estado de transición. El semisueño podría ser (digamos con una figura) el "techo" del sueño. Pero, si bien se nos aparece como el techo del sueño, se nos aparece también como el "piso" de la vigilia.

El estado de vigilia ordinaria, en el que estamos ahora, supongo... (risas)... está montado sobre ese piso. No está desvinculado, por consiguiente, de ese piso, sino que éste le sirve de base, de apoyo. Y así en nuestro estado de vigilia ordinaria, somos bombardeados por contenidos del bajo fondo. Aquellos contenidos que, en el primer nivel de conciencia eran muy fuertes, muy sugestivos (en ellos se creía a pies juntillas), cubrían nuestra conciencia, hacían que nuestra autocrítica disminuyera. En el segundo estado, en el estado intermedio, iban disminuyendo en su intensidad. Y en el tercer estado, aunque no desaparecen del todo, han disminuido sensiblemente en su poder sugestivo.

De manera que las imágenes que ahora pueblan nuestra conciencia mientras hablamos o mientras escuchamos, a veces se nos escapan, pero con un poco de atención y un poco de práctica, las vemos fugazmente pasar por nuestra conciencia. Estas imágenes todavía están actuando. Estas imágenes normalmente, sobre todo en situaciones opresivas y en situaciones de cansancio, se superponen a las mismas percepciones que uno tiene de lo que ocurre. Las cubren de tal modo que se genera un fantaseo o un ensueño, que nos distorsiona completamente la realidad. Merced a ese fantaseo y a ese ensueño, no tenemos de la realidad una percepción correcta, una percepción adecuada. Y éste es nuestro problema.


Existe la posibilidad de un estado de conciencia que no sea tocado por estas imágenes que nos borran la percepción. Existe un nuevo estado de conciencia que pudiéramos llamar de: "conciencia de sí" y no de conciencia alterada, no de conciencia deformada por las imágenes del ensueño que vienen desde aquellas profundidades. Tal vez ese estado existe, tal vez no sea cosa del otro mundo.
Ahora bien, pueden existir estados que eleven nuestra conciencia, que amplifiquen nuestra conciencia, que nos permitan un conocimiento más vasto y más amplio de la realidad externa y de la realidad interna. Cuando nosotros leemos al señor Buda no podemos ver en él la minimización de la conciencia. Al contrario, parece que nos encontráramos frente a una enorme y compleja computadora, o algo más... De manera que ahí estamos en presencia de otro fenómeno. A veces nosotros, gentes comunes que ocasionalmente nos ocupamos de estas cosas, tal vez por nuestro deseo de obtener resultados rápidamente, es muy probable (es casi seguro) que vayamos a dirigirnos en la dirección más fácil, en la dirección de caída, en la dirección infraconsciente, en la dirección crepuscular y de ninguna manera en la otra dirección. Ese es el motivo por el cual, aunque sea esquemático, nosotros nos permitimos disparar nuestros dardos contra todo lo que suene a religión y la mística.


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Silo - Meditación Trascendental - 17 de agosto de 1972